AL REVÉS DE YOKO
Retené en la mente –aspirar-
tu mejor paisaje,
y sin más,
enterralo en algún lugar del cielo –exhalar-
que las nubes lo cuiden.
CIELO 1
Sorprende ese cielo cristalino,
de tan claro pueden verse –a simple vista-
dos, tres, y algunas veces más,
de sus capas superpuestas,
vibrando desde siempre,
regenerando esos pequeños tajos
por donde se devuelven los pájaros osados,
-esos, con plumas de cobre-.
De tan claro
se vuelve un puro reflejo
de nuestro adentro.
Así dicen en el campo.
ESAS ROCAS
Esas rocas, islas diminutas
Desplegadas y expuestas por seres inmensos
-De adentro hacia fuera-,
Nos enseñaron a todos, a vos, a él, a mí,
Que no hay escondite posible
Ni ahora ni nunca.
Tanto me gustó ese archipiélago
Que lo traje entre los pliegues
De mi traje de baño.
Solo imagino el estupor de los gigantes.
MATERIAL
En bronce,
Se ejercitan los forzudos.
En terracota
Se durmió un ejército oculto.
ESPEJOS
Los espejos rechinan de impaciencia
Necesitan, más que nada, más que el agua
Algún humano en que reflejarse.
A veces (no es lo mismo)
Atraen algún perro, algún gato.
PAJARO DE FUEGO
Pájaro de fuego,
fénix inconcluso,
resignado a arder.
Quizás un alma errante.
Un soplido rojizo,
despide al último,
de sus acólitos.
SIN TITULO ALGUNO, PURA CONCIENCIA
Y volvieron a caminar sobre esta tierra,
De ocre –huelen y- se visten los brujos.
Y el futuro ya no es más hacia delante,
Sino hacia los costados y mis otras vidas se perciben simultáneas,
El universo se ha vuelto un laberinto,
y mi destino, concéntrico.
Mi conciencia quedó herida en dos estados:
En uno,
La tremenda certeza de saber
Que soy un peñón,
entre otros miles de millones
que la distancia entre nosotros,
es infranqueable
que nuestra desaparición,
es un desgarro solitario
que todo vínculo,
es una ilusión
que esto, no es un juego.
En otro,
Que solo el amor nos redime,
Aunque a veces, la redención de unos, sea la perdición de los otros.
Como hombre, haré lo posible por ser optimista,
Y esa será mi obra maestra.
ABIERTO
Desde ese día,
Todo lo que abrí,
A su vez, me abrió a mí.
Y de esa forma
Me acostumbré a vivir
Rodeado de aberturas,
Que se abren
Hacia otras aberturas.
ASTROTAUROS
Astrotauros,
Macroseres colosales, solemnes, inmortales;
El astrotauro no se ve, se intuye,
El astrotauro no se entiende, se imagina.
Es uno de los tantos astroseres,
Poblando en rebaños
Las praderas vacías.
DOS JAGUARES
Por mi escritorio
Inquieto se pasea
Un jaguar verdinegro,
De madera.
Allá en el Arenal
La noche es fuego repentino
Y el jaguar rojo escapa
Destejiendo acantilados.
La tierra tiembla en un rugido
Que se traga el sueño
De los cansados campesinos.
Cada uno quisiera ser su hermano.
CONCIENCIA
Uno, dos, tres...
Alguna vez, pienso, fui parte invisible del misterio astral:
Un conjunto de átomos
incontables,
helados,
aislados.
Y ahora escribo para vos, desangrando una birome filosa.
Sos y vas a ser siempre, mucho más que un perfil que se repite,
Cuatro, cinco, seis...
NO TE OLVIDES
No te hagás la distraída,
conozco esa tormenta limpiándote las venas
y conozco a quién la sopla: no te pongas colorada!
O acaso te olvidás
que sos un tatuaje sagrado,
y yo los pigmentos que usaste.
O te olvidás
que también estoy hecho de tus recuerdos.
Cuando me leas, por favor,
no te distraigas entre letras, confundiendo
lo escrito con otros horizontes.
TROPICO
Por más que afuera acuarele el sol de calor celeste
que abajo la selva se hierva en su propio verdor,
o que la tarde parezca transparente,
los miedos se despliegan en la galería descubierta.
Ahí, en ese costado vacío crecen los temores,
como estatuas, como máquinas.
Desafiantes?
No. Ni ellos saben...
Se quedan hasta que el viento del noreste los barre.
Volverán? Ni ellos saben.
EL QUE ESCRIBE NO SOY YO
Las palabras; el nudo.
Quién escribe no soy yo,
sino mi nudo volcánico, tergiversador invisible,
estrangula mi aire, y me respira los pulmones,
y rueda conmigo, como una rueda de clavos.
Soy el único dueño de un nudo hormiguero,
que de tanto en tanto, se desata, y me libera.
HOY
Hoy desperté endemoniado:
es que tus ángeles,
podrían no ser los míos.
Hoy ví el horror al vacío,
anclado allá lejos,
veinte años detrás mío.
Hoy tuve miedo
A ser un BMW negro
con cincuenta años de soledad adentro.
EL FIN DE LOS DIOSES
Allá en Africa,
la muerte ametralla con hambre la savannah moscosa.
Los dioses de esos hombres,
recordados en marimbas –apenas presentes en el brillo de la plata-,
también habrían muerto.
La savannah hirsuta
se había vuelto un inmenso interrogante.
DIOS
Tal vez Dios sea
un refugio indiferente;
y haya sido él quién entendió mal en Babel.
Tal vez seamos nosotros, el dios de nuestro Dios.
-Su existencia o inexistencia, un ejercicio inútil-
TRANSFORMACIÓN
Si a Octavio, alguna vez, un árbol le nación en la frente;
A vos,
Las cejas se te cubrieron de flores,
Tu cuerpo mutó a un arco pieláceo
De exquisitos tendones, que apunta y me dispara:
Y ahí voy,
Un misil furioso buscando su destino concéntrico,
Un navegador trepando la lluvia en su salvavidas,
Un satélite inseguro esperando tu guiño de luces.
CONTRADICCIÓN
Jamás Siempre
Ahora Nunca
Debiera dejarlo así,
pero la belleza de la contradicción
me baila en la cabeza.
MERLO –SAN LUIS-
Poder desmenuzar el aire, separarlo de la tenue pátina,
tejida en silencio, por una araña mágica.
Poder aislarlo, tamizarlo, desmadejarlo...
Absorber de un modo ignorado su presencia absoluta.
VISIONES
Mi vista se escapó de mí,
y anda por ahí, adelantada hacia el boulevard
-casualmente entre caminantes y llovizna-
¿Será exacto lo que después me traiga?
Por mi parte ya me acostumbré
a recibir caprichos y espejismos.
ya aprendí, que de tanto en tanto,
mi vista cuadricula, desangula y se confunde,
obligándome a recomponer, a sanar sin haber visto.
UN SEPULCRO QUE DEBE EVITARSE
Un pequeño dragón al Este, sereno, y al Oeste un león tallado, inmóvil.
En el medio dos piedras, una muda, la otra en cruz.
Las sombras del día desplomado conmueven los pastos cubiertos de viento.
Desde el Sur, tres figuras de cansancio y una mula de polvo,
se acercan, ignorantes, sin notar que ,de a poco,
el horizonte marino comienza a evadirse.
LA INFANCIA VUELVE DESDE ADENTRO
Una veta en la piedra más gris, es lo que sobrevive desde esos tiempos
Una larga rajadura de inspiración, de nubes afiladas como grullas
Sobre perfumes permanentes volcados en papel de arroz
Sobre los arrozales más verdes y ondulados
Sobre las historias desplomadas de un día plomizo.
De un único tajo central
Llega el jugo vertebral
De los tiempos infantiles.
ATMÓSFERA
I
Quietud lunar en la respiración; dominio perfecto del cuerpo.
Concentración.
Tranquilidad lunar exhalada y contagiada.
Habitación cerrada y postura perfecta.
Conciencia lunar sin pasado ni futuro, concentración e hipnosis.
Hipnosis.
Ensoñaciones diluidas en la habitación cerrada.
II
Presencia en la habitación, forma irresoluta, rodeada de frío.
El piso es tablero de ajedrez, el techo es silencio.
Pesadamente
los mundos giran en el cuarto.
Triángulos
Proyectados hacia la oscuridad
Hacia la tranquilidad del espacio exterior.
III
Nova!
En un vértice la claraboya invita al infinito con miles de ademanes.
Parábolas, distancias chispeantes, armonía en silencio presunto: vida.
Crujidos sordos liberados al espacio. Distancias incontrolables en la habitación esfumada.